El Parador de Zamora, un impresionante palacio del siglo XV erigido sobre las ruinas de una antigua alcazaba romana, brinda a sus visitantes una experiencia única en la encantadora provincia de Zamora. Este magnífico hotel fusiona la grandiosidad medieval con el refinado estilo renacentista, ofreciendo un ambiente evocador y lleno de historia. En su interior, la atmósfera medieval se ve realzada por armaduras, tapices nobiliarios y elegantes camas con dosel, mientras que su patio renacentista, con una galería acristalada de madera y escudos heráldicos, añade un toque de sofisticación. Los suelos y vigas de madera aportan una calidez especial a la decoración, que evoca el esplendor nobiliario de épocas pasadas. El Parador cuenta con 52 habitaciones climatizadas, cuidadosamente diseñadas para ofrecer el máximo confort. Los huéspedes son recibidos en un vestíbulo con recepción 24 horas, y pueden hacer uso de servicios como caja fuerte, cambio de divisa y ascensor. Además, el hotel dispone de una cafetería, bar, sala de TV y un restaurante que invita a degustar la gastronomía local. Para aquellos que necesiten mantenerse conectados, hay acceso a Internet WLAN, así como servicio de habitaciones y de lavandería. Con dos salas de conferencias disponibles, el Parador de Zamora es también un lugar ideal para eventos y reuniones, proporcionando un entorno histórico y elegante para cualquier ocasión.
El Parador de Zamora se encuentra en la emblemática Plaza de Viriato, en el corazón del casco histórico de Zamora, una ciudad rica en patrimonio cultural y arquitectónico. Este majestuoso hotel ocupa un antiguo palacio renacentista del siglo XV, lo que lo convierte en un punto de referencia tanto para los turistas como para los locales. La ubicación del Parador permite a los visitantes sumergirse en la historia y la belleza de la ciudad, con monumentos como la Catedral de Zamora, el Castillo y las numerosas iglesias románicas, todos a poca distancia. Llegar al Parador de Zamora es sencillo, ya que está bien comunicado por carretera y transporte público. Si vienes en coche desde Madrid, toma la A-6 en dirección a A Coruña y luego la A-11 en dirección a Zamora. Una vez en la ciudad, sigue las indicaciones hacia el centro histórico; el Parador dispone de aparcamiento para sus huéspedes. Si prefieres el transporte público, la estación de tren de Zamora está a unos 15 minutos en taxi del Parador. Hay trenes regulares que conectan Zamora con Madrid y otras ciudades importantes. Desde la estación de autobuses, también a unos 15 minutos en taxi, hay líneas que conectan con diversas localidades de la provincia y otras regiones. La ubicación del Parador de Zamora en la Plaza de Viriato ofrece la combinación perfecta de accesibilidad y encanto histórico, permitiendo a los visitantes explorar fácilmente la fascinante ciudad de Zamora.
El Parador de Zamora ofrece una experiencia única con sus 52 habitaciones de estilo renacentista, donde la tranquilidad y la elegancia se combinan a la perfección. Cada habitación está equipada con un cuarto de baño completo que incluye un secador de pelo, ideal para su comodidad. También disponen de teléfono de línea directa y TV, para mantenerse conectado y entretenido. El minibar y la caja fuerte añaden un toque extra de conveniencia, mientras que el aire acondicionado y la calefacción regulables aseguran una estancia confortable en cualquier época del año. Un refugio perfecto para relajarse y disfrutar.
El Parador de Zamora, ubicado en un histórico palacio renacentista, ofrece una experiencia única con su elegante decoración y vistas panorámicas. Además de su exquisito restaurante, los huéspedes pueden disfrutar de una piscina al aire libre, gimnasio, y conexión Wi-Fi gratuita. Ideal para explorar la rica cultura y patrimonio de Zamora.
El Parador de Zamora ofrece a sus huéspedes una amplia variedad de métodos de pago para mayor comodidad. Acepta tarjetas de crédito como American Express, Diners Club, JCB, MasterCard y VISA, garantizando una experiencia sin complicaciones al momento de realizar su pago. Disfrute de su estancia sin preocupaciones.