Si para ubicar hoteles se reutilizan palacios, prisiones, faros y mil y un sitios raros más ¿por qué no recurrir a uno de los modelos arquitectónicos por excelencia de España? Y efectivamente, hoy en día es posible alojarse en plazas de toros rehabilitadas y adaptadas para esta nueva función, tanto en nuestro país como en otros de habla y cultura hispanas. Un buen ejemplo es la Plaza de Toros de Almadén (Plaza de Waldo Ferrer s/n, Ciudad Real),la segunda más antigua después de la de Las Virtudes de Santa Cruz de Mudela. Construida en 1775, es un edificio hexagonal de 2 plantas (la inferior con arcadas y la superior adintelada) con un coso taurino de esa original forma, tejado a dos aguas con chimeneas y amplio balcón voladizo de rejería que, desde 1979, está catalogado como Monumento Histórico-Artístico Nacional. Una de las características de este sitio es que la parte exterior estaba destinada a viviendas: en concreto, 24 habitáculos cuyo alquiler, unido a la recaudación de las corridas, se destinó a la construcción del Hospital de Mineros de San Rafael, pues las minas de azogue eran el principal motor económico de la zona; de hecho, la técnica arquitectónica del inmueble denota el carácter minero de sus arquitectos.

Reconversión en hotel

En 1998, tras una etapa de decadencia, se precedió a restaurar la plaza, recuperando el antiguo uso como alojamiento pero reconvirtiendo las viviendas en hotel. Las obras terminaron en 2003 y también volvieron los festejos taurinos, además de ubicarse allí la Oficina de Turismo. Los clientes disponen de 23 habitaciones dobles (de ellas una suite con dosel y 3 junior suites), equipadas con aire acondicionado, TV, teléfono, minibar, caja fuerte, acceso a Internet y baño completo. Además hay comedores privados, salones para eventos -incluyendo una continua política de organización de espectáculos musicales, artísticos y culturales-, aparcamiento, ascensor, bar, cafetería y restaurante. Por supuesto, también se han conservado las zonas puramente taurinas, desde el coso -que se puede utilizar para bodas y banquetes- a los corrales, pasando por la barreras, los burladeros, el desolladero, la puerta grande, etc. El hotel de la Plaza de Toros de Almadén es de 3 estrellas, adaptado para personas de movilidad reducida, y oferta una serie de actividades de ocio, como montar a caballo o rutas guiadas por la comarca y el Parque Minero.