
Dicen por ahí, que en España hay algo más de 30 millones de smartphones en activo y tiene toda la pinta de ser verdad. Todo el mundo tiene móvil, y el hecho de que haya tanto smartphone en nuestras manos, solamente es un reflejo de lo accesible que puede llegar a ser este invento. Es algo que se ve fácil. También dicen por ahí, que las personas mayores no tienen e-mail y que no suelen comprar online, pero en esto… fíjate tú, no me lo creo tanto.
Al menos ya no. Y te diré más, cada vez que lo oiga, replicaré levantando el dedo índice y poniendo cara de “doctor en la materia”; porque queridas amigas y amigos, el cliente Senior, no se está quedando atrás en la digitalización: todo lo contrario.
Pongamos como punto de partida, algo tan sencillo como tener e-mail. Un usuario medio cualquiera, como el que suscribe: como profesional, tengo al menos una cuenta de correo, relacionada con mi actividad diaria. Después, en lo personal tengo tres cuentas, cada una para una cosa distinta: una para utilizar con los amigos y que tengo conectada a Facebook, Twitter, Google+ e Instagram; otra cuenta que tengo para temas administrativos, como el alquiler del piso, el banco, los suministros de la vivienda, Internet, etc. y, por último, otra que tengo para la prensa digital, recibir ofertas, publicidad, viajes, webs de interés a las que estoy afiliado y en la que se puede comprar online. En este balance tan de andar por casa, a mí me salen cuatro cuentas.
Si ahora soy un comprador online, dentro de veinte años… lo seguiré siendo.
Y todo esto, sin pensar en que seguramente de aquí a unos añitos, el mercado nos pondrá en bandeja nuevas vías de comunicación, mejoras en las compras de viajes online, en la automatización de procesos, en la personalización de las sesiones dentro de las webs, en la interactividad y accesibilidad de los contenidos, etc. De hecho, muchos de estos avances, ya están en marcha. Así que seguro, habrá muchos más, y el punto de partida para conectarnos a una web o a una red social y hacer algo tan sencillo como iniciar sesión, muy probablemente seguirá siendo el e-mail o el teléfono móvil ¿nos apostamos algo?
Por eso, los que hoy todavía no somos Senior, dentro de un tiempo, querremos seguir conectados e informados y será el propio mercado, el que nos lo vaya diciendo con hechos a los profesionales de las agencias de viajes. Y la imagen, de que el abuelo o la abuela, vayan a su agencia de viajes acompañado por un familiar, porque “no se enteran por la web” será cada vez menos frecuente. Si de jóvenes éramos o somos el futuro, en unos añitos, seremos los abuelos y abuelas del mañana ¿lo habías pensado alguna vez?