
Soplan vientos de cambio para la historia de la aviación alemana. El próximo 3 de junio abrirá sus puertas el
nuevo aeropuerto de Berlin-Brandenburgo, llamado así en honor al Premio Nobel de la Paz Willy Brandt, y que aspira a convertirse en
el aeropuerto más grande y moderno de Europa.
Tres aeropuertos en uno
Con un inversión total que se prevé ascienda a los 2.500 millones de euros, el aeropuerto de Berlín-Brandenburgo tendrá una superficie de 1.470 hectáreas y capacidad para 27 millones de pasajeros en el momento de su apertura, con vistas a que llegue a los 45 millones en el futuro.
Pero no son sus impresionantes cifras las que escriben una nueva página en la historia de la aviación alemana, sino el hecho de que su apertura venga acompañada del
cierre de los aeropuertos de Tegel y Schönefeld,
como ya sucediera con el histórico aeródromo de Tempelhof en 2008. Con la fusión de estos tres aeropuertos, todo el tráfico aéreo queda agrupado en una única estructura.
Un paso hacia el futuro
El aeropuerto de Berlín-Brandenburgo estará ubicado junto al antiguo aeropuerto de Schönefeld y contará con
un diseño muy moderno, de claras formas geométricas con influencias que van desde el diseñador prusiano Karl Friedrich Schinkel al estilo Bauhaus.
Asimismo, el nuevo aeropuerto incorporará las
últimas tecnologías en materia aeroportuaria, como por ejemplo 200 máquinas de auto check-in que evitarán las largas colas en los mostradores de facturación.
La preocupación por la
preservación el medio ambiente está también muy presente en su construcción. El aeropuerto contará con sistemas de recuperación de calor altamente innovadores e incorporará el uso de energías renovables, como energía geotérmica o sistemas de refrigeración con agua de lluvia.
Más vuelos y mejores conexiones
La apertura de este aeropuerto proporcionará a Berlin
muchas nuevas conexiones sin escala a destinos de Europa y todo el mundo.
Lufthansa por ejemplo ya ha anunciado sus planes de aumentar el número de vuelos desde la capital alemana a partir de junio de este año.
La gran noticia para los viajeros es que entre esos vuelos se encuentran por primera vez
conexiones sin escala con España, lo que pone cada vez más fácil visitar Berlin
volando desde Barcelona, Valencia, Málaga y Palma de Mallorca (primeras ciudades que la aerolínea alemana tiene pensado conectar con Berlin) a precios realmente competitivos.